El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha advertido al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que los acuerdos que se puedan acordar en la comisión bilateral "no serán la moneda de cambio" para "no abordar el conflicto político" entre Cataluña y España.
Aragonès ha calificado de "insuficiente" el resultado de esta comisión porque quiere los 56 traspasos pendientes, y ha advertido a Sánchez que estos "no son, ni pueden ser, ni serán, la moneda de cambio para no abordar el conflicto político con la amnistía y el referéndum".
El presidente ha sacado pecho por conseguir que la relación con el Ejecutivo español sea "de igual a igual" y ha confirmado que asistirá presencialmente en la reunión de la mesa de diálogo en septiembre. "Vamos con la máxima ambición, por eso será difícil. No vamos a renunciar a nada", ha dicho.
Pere Aragonés ha dicho en este sentido que "en la mesa de negociación la Generalitat defenderá su posición: amnistía y la autodeterminación, fin de la represión y un referéndum para decidir el futuro del país".
Finalmente, ha detallado que intensificará las reuniones y los encuentros "discretos" con los partidos y entidades independentistas para llegar juntos a la reunión de septiembre. Además ha señalado que cualquier acuerdo que salga de la "mesa de diálogo" tendrá que contar, posteriormente, "con el aval de la ciudadanía de Cataluña con el voto".