El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que el Estado aplace el pago del IVA, el impuesto de sociedades y las cotizaciones de la Seguridad Social a las empresas afectadas por las nuevas restricciones encaminadas a detener la proliferación del coronavirus.
Aragonès, en una carta enviada al jefe del Ejecutivo español, le exige la moratoria de estos impuestos después de que la Generalitat aplicara el cierre de bares y restaurantes, la limitación el comercio y la prohibición de reuniones de más de seis personas durante los próximos quince días para detener el incremento de infecciones.
"Esta es una exigencia urgente, que si dependiera de nosotros, ya habríamos tomado, y que sumamos a la necesidad no atendida de ayudar económicamente a los padres y las madres que no pueden trabajar porque tienen que atender a menores en cuarentena preventiva", afirma Aragonés a la carta, donde pide tomar las "medidas necesarias" para evitar que tengan que cerrar empresas debido a las restricciones adoptadas para frenar el patógeno.
Aragonès también traslada al presidente español Pedro Sánchez que "no tendría ningún sentido que el Estado continúe cobrando impuestos como si no pasara nada, cuando muchas empresas no pueden operar con normalidad" y pide complementar la ayuda económica facilitando la moratoria del pago de préstamos y de los suministros básicos.
"Una de las medidas más destacadas y con una derivada económica de mayor calado es la de limitar la actividad de bares y restaurantes a servir, únicamente, comida para llevar durante los próximos 15 días" apunta el vicepresidente. "Tras esta medida no hay otra voluntad que contribuir a limitar las interacciones sociales en unos espacios donde, a pesar del gran esfuerzo de los profesionales, la ciudadanía se relaja en exceso y facilita la propagación de la pandemia" explica.