El Govern intentó repescar al dirigente de la CUP, Pau Juvillà, que fue suspendido por la entonces presidenta del Parlament, Laura Borràs, de su condición de diputado a instancias del TSJC por negarse a descolgar unos lazos amarillos de su despacho municipal, en lo que fue una de las primeras polémicas de la legislatura.
A Juvillà le propusieron ser el director general del Memorial Democrático, según ha reconocido el dirigente de la CUP confirmando de este modo la noticia avanzada por el diario Ara. Sin embargo, ha decidido rechazarla descontento por la gestión del Govern.
"Cierto, el @gobierno de ERC me ofreció la dirección general del Memorial Democrático y decliné la oferta", ha explicado en twitter. "Lo hice desde el convencimiento porque no comparto la línea política del Govern y sí, lo compartí con el conjunto de la organización, como no puede ser de otra forma", añade. "La decisión es siempre es colectiva. Aquí está nuestra forma de ser y nuestra fuerza", remarca.
"Seguramente sería positivo que ERC quisiera establecer relaciones sinceras con la CUP. Positivo, sobre todo, por el conjunto de ciudadanos y ciudadanas del país que es a quien nos debemos como representantes y servidores públicos. Para ello, sería necesario un giro evidente en sus políticas", sentencia.
És cert, el @govern d’ERC em va oferir la direcció general del Memorial Democràtic i vaig declinar l’oferta.
— Pau Juvillà (@pjuvilla) November 9, 2022
Voldria fer algunes consideracions al respecte. https://t.co/mXto0vigN7