El líder de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, asistió a la toma de posesión de Pere Aragonés como nuevo presidente de la Generalitat. Cuixart coincidió con el ministro de Política Territorial, Miquel Iceta. Ambos se saludaron con un abrazo, que ha sido muy criticado en las redes sociales por numerosos independentistas.
Miquel Iceta ha sido acusado por parte del independentismo de ser "colaborador" de la "represión" del Estado. Incluso la dirigente de JxCat, Elsa Artadi, utilizó estas palabras para referirse al dirigente del PSC.
También el ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, aseguró durante la última campaña electoral que "la represión lleva el sello del PSC". "Sin Iceta ni Sánchez no habría habido 155", añadió.
Por su parte, Oriol Junqueras, afirmó en mayo de 2019 que "los socialistas, en lugar de dialogar, aplauden la represión". También lo invitó a visitarlo en la cárcel "si tiene la conciencia tranquila".
