El empresario Jordi Soler, vinculado a la trama del 3% habría pagado el viaje del Síndic de Greuges en Berlín, en 2015, para ver la final de la Champions League que enfrentó al Barça con la Juventus, según un informe de la Guardia Civil y que ha publicado El País.
Después de examinar los mensajes del iPhone de Soler, la Guardia Civil sostiene en un informe que el constructor abonó los gastos del viaje a altos cargos del Gobierno de Artur Mas y a otras personalidades para "obtener un trato favorable" de las autoridades. Una de las personas a las que habría pagado el viaje sería al Síndic de Greuges, Rafael Ribó.
El informe policial, remitido a la Audiencia Nacional destaca que el objetivo de esta generosidad era "obtener cierta capacidad de influencia" sobre aquellas personas y recalca el gran "desembolso económico" que supuso para Soler aquel obsequio.
El informe detalla las conversaciones entre el constructor Jordi Soler y Ramon Camp, un histórico de Convergencia, en las que Camp le comenta que "Rafael tiene una entrada proveniente del Barceló y me pregunta si tiene una plaza para su hija Alba", haciendo referencia al Síndic de Greuges.
Los mensajes muestran que el propietario del Grupo Soler organiza con ayuda de su secretaria la contratación de un vuelo privado entre Barcelona y Berlín. La Benemérita, en su informe, apunta que "al menos en cuanto al desplazamiento y los traslados desde el aeropuerto hasta el Estadio, se habría hecho cargo el señor Soler". La final se disputó el 6 de junio de 2015 en el Estadio Olímpico de Berlín.