El PDECAT comenzará este lunes un proceso participativo entre la militancia para redefinir su estrategia, pero también para dilucidar cuál debe ser su relación con otros espacios como Junts per Catalunya y la Crida Nacional. El presidente del partido, David Bonveví, ha destacado que debate será abierto y, por lo tanto, se da pie a cualquier posibilidad: desde si continúa la marca PDECAt o se diluye en JxCat hasta un nuevo cambio de nombre o de liderazgo. O tal como ha apuntado, si la Crida acaba siendo un espacio transversal, como fue concebido cuando se creó, "el PDECAT colaboraría" para integrarse.
De este debate interno, que se articulará a través de las asambleas comarcales y de distrito, también puede salir el contrario a la disolución: que los socios decidan no implicarse en JxCat -a pesar que se han presentado así a las elecciones- y potenciar el partido. Las asambleas comarcales y de distrito tendrán la última palabra. A diferencia del proceso participativo del año 2016, en el marco de la refundación de CDC, la dirección no ha hecho preguntas preestablecidas y cada militante podrá llevar su propuesta.
"Es un debate duro, contundente, que te pone delante del espejo. Es un debate que va a la raíz", ha reconocido Bonvehí. El proceso finalizará el 20 de septiembre, votarán 15.000 socios -13.000 del PDECat y 2.000 que aún tiene Convergència- y abordará tres grandes ejes generales: la utilidad de los partidos políticos hoy en día, "todas las cuestiones que afecten al PDECat", y "el proyecto político".
El partido ya arrancó con bronca en el congreso de la refundación de Convergencia celebrado hace tres años. Más Cataluña o Catalanes Convergentes eran los nombres que había sobre la mesa para tomar el relevo de CDC, pero los simpatizantes los rechazaron, por lo que se decidió posponer el debate y crear una comisión que hiciera este debate y fijara los plazos para el bautismo.
De este debate salieron opciones para convertirse en el nombre de la "nueva CDC": Juntos por Cataluña, Partido Nacional Catalán y Partido Democrático Catalán. Estas tres propuestas -finalmente va caerá la de Partido Nacionalista Català- superaron el 60% de apoyo a la comisión creada para solucionar el lío creado en el congreso fundacional después de que una revuelta interna aplazara la votación.
Los asociados escogieron el nombre de Partido Democrático Catalán, pero el Ministerio del Interior no permitió el registro porque consideraba que había errores de forma en los estatutos del partido y también les advirtió que ya había otros partidos registrados con una "denominación muy similar". Ante esta situación, el partido salvó las trabas incluyendo el término "europeo".
