La Dirección General de Administración de la Seguridad (DGAS), que depende del Departament d'Interior, no tramitó el año pasado, según informa El País, ninguna de las 1.200 actas que levantaron los Mossos d'Esquadra en manifestaciones y reuniones públicas celebradas en Cataluña.
El Departamento de Interior, con Miquel Buch de consejero, no resolvió y ni siquiera inició un solo expediente sancionador. La nula actividad administrativa en esa materia se produjo durante la etapa de Jordi Jardí como director general.
Fuentes policiales atribuyen la ausencia total de expedientes a la voluntad política del Govern de Quim Torra de no castigar las movilizaciones independentistas con sanciones económicas. El Departamento, por su parte, ignora por qué no se tramitó ningún expediente, pero añadió que está “mirando y analizando” el asunto.
El presidente del grupo parlamentario de Ciutadans, Carlos Carrizosa, considera "una vergüenza" esta información. "Porque estas noticias, cuando saltan en un país democrático normal, todo el mundo diría, o sea, ¿que aquí hay un político que decide qué cosa se tramita y qué no, al margen de las leyes? Luego se extrañan ustedes de que se judicialice la política, si eso es una prevaricación como la copa de un pino", ha sentenciado.