El grupo municipal del PDeCAT al Ayuntamiento de Altafulla ha vuelto al gobierno municipal, reeditando el pacto con Alternativa Altafulla, el partido del alcalde, Fèlix Alonso. Hace sólo tres meses y medio que el PDeCAT había decidido romper el gobierno por la falta de apoyo de Alonso en el proceso independentista.
En ese momento, desde el PDeCAT esgrimieron “diferencias insalvables” con el alcalde que impedían mantener el acuerdo de gobierno. Estas diferencias venían, sobre todo, por la negativa de Fèlix Alonso a ceder locales municipales para poder votar en el referéndum del día 1 de octubre. Alonso también consideraba el 1-O como una “movilización”, más que un referéndum.
Pero aquellas diferencias insalvables han durado poco más de tres meses. Con las aguas de la política catalana más calmadas que durante el último trimestre de 2017, el PDeCAT opta ahora por reeditar el pacto, con el objetivo de garantizar la estabilidad y poder sacar adelante los diferentes proyectos municipales.
El acuerdo se ha anunciado este lunes, asegurándose desde el consistorio que se mantendrá hasta final de mandato. El gobierno vuelve a tener ahora una mayoría de siete concejales, cinco de Alternativa Altafulla y dos del PDeCAT, mientras que en la oposición quedan los tres concejales de la Herramienta y un concejal no adscrito.
Los concejales del PDeCAT se harán cargo de Hacienda (Pere Gomés) y Juventud, Acción Social, Mayores y Medios de Comunicación (Xavier Rofas). El pacto en el Ayuntamiento de Altafulla es uno de los que se rompió después del 1-O y los convulsos acontecimientos de las semanas siguientes a la política catalana y española.