Ramon Tremosa considera que el debate de la memoria historia en Cataluña no servirá de nada si no se equiparan los "los crímenes de la persecución religiosa en la zona republicana como una parte de nuestra historia, poniéndola al mismo nivel que los asesinatos cometidos por Franco." El profesor de Teoría Económica explica en un artículo publicado este jueves en el diario Avui, en el que habla del documental Topografía de la memoria, dirigido por Dolors Genovès, que el debate de la memoria histórica en Cataluña "sólo será útil si asumimos los crímenes de la persecución religiosa en la zona republicana como una parte de nuestra historia, poniéndola al mismo nivel que los asesinatos cometidos por Franco. En su libro El silencio de las campanas, la persecución religiosa durante la guerra civil (Proa, 2007) Jordi Albertí concluye que las matanzas de 1936 fueron planificadas por la FAI y la CNT".
"Eso, sin embargo, hoy incomoda mucho, porque empaña la imagen de una República entendida como paradigma de las libertades. Ésta es la cara más oscura de la reacción en Cataluña después de la sublevación franquista: 2.441 eclesiásticos asesinados sobre un total de 8.360 muertos por la represión en la retaguardia, una gran parte gente de misa (algunos brutalmente torturados). En medio de una gran virulencia antieclesial, partidos políticos y agentes sociales de la izquierda fueron cómplices en diferente medida de estas matanzas, inhibiéndose con omisiones más o menos culpables. Bienvenido sea el nuevo documental de Dolors Genovès, vibrando como los que siempre ha dirigido. Éste, como el libro ahora mencionado, es un trabajo valiente y necesario: todavía nadie ha pedido perdón por muchos de aquellos crímenes", añade.