La Generalitat se encuentra con complicaciones para hallar un banco que avale las finanzas de los ex altos cargos del Govern acusados por el Tribunal de Cuentas. El tribunal les reclama un total de 5,4 millones de euros por gastos en la promoción exterior del proceso y la búsqueda de apoyos internacionales para la independencia de Cataluña entre 2011 y 2017.
El gobierno catalán anunció esta semana la creación de un fondo de 10 millones de euros para avalar a los encausados. Jaume Giró, consejero de economía y hacienda, no quiso dar detalles de la entidad financiera con la que la Generalitat trabajaría para hacer frente a las fianzas impuestas por el Tribunal de Cuentas. El Govern está encontrando dificultades para cerrar el acuerdo y los grandes bancos estarían dando la espalda a la Generalitat, según apunta El Confidencial.
Los bancos son conscientes de la pérdida de reputación que podría suponer mostrar su apoyo a los encausados con avales. "Tendrán que pedirlo en otro lugar" o "nosotros seguro que no, borda la ilegalidad", son algunas de las declaraciones extraoficiales por parte de los grandes bancos del país que refleja El Confidencial.
Además, el Tribunal de Cuentas ya adelantó que, en caso de que una administración pública se hiciera cargo de los embargos, sería "fraude de ley". Esto supone un obstáculo más para la Generalitat en la búsqueda de una entidad financiera.