El presidente del grupo parlamentario de Junts per Catalunya, Albert Batet, ha asegurado que el objetivo de la reforma del delito de sedición es "la extradición del presidente Puigdemont" y ha lamentado que ERC le haya pactado "sin hablar con los represaliados y sin hablar con las fuerzas independentistas".
"Quieren su extradición a cualquier precio. Su obsesión tiene nombres y apellidos, presidente Puigdemont, y demuestra que no hay ninguna separación de poderes ni garantía alguna", ha manifestado. Batet ha asegurado que existe una "persecución política" contra Puigdemont, pero ha dicho a los dirigentes socialistas que "abandonen toda esperanza" porque "el exilio ya abolió el delito de sedición con la sentencia de Alemania en 2018".
Por último, el dirigente de Junts criticó que el presidente Sánchez y la vicepresidenta Calviño hablen de Puigdemont como "condenado" y recordó que el expresidente "siempre compareció" cuando fue llamado ante la justicia de países europeos.