Junts per Catalunya rechaza la renta básica universal pactada entre ERC y la CUP en el acuerdo de investidura y que se desplegará en tres fases, según el acuerdo: en una primera, este año, se llevará a cabo un estudio de las opciones de diseño de esta medida por "alguna o algunas franjas de edad" y de qué modificaciones se requieren para aplicarla.
El año que viene, los partidos se comprometen a implementar las mejores y transformaciones acordadas en políticas de rentas sociales y del plan piloto de renta universal para las franjas de edad más vulnerables. Y dentro de dos años, en 2023, arrancará la tercera parte del proyecto, con la evaluación del impacto y funcionamiento de la renta básica y el planteamiento de propuestas para ampliarla, "en su caso".
La portavoz del grupo parlamentario de Junts, Gemma Geis, ha manifestado durante el debate de investidura que "nos preocupa el impacto presupuestario de este acuerdo. Por ejemplo, el economista Germà Bel hacía referencia al impacto presupuestario de 4.200 millones de euros de la aplicación de la renta garantizada universal". "Nos sentimos lejos de este proyecto de país que han pactado con la CUP", ha remachado.
La portavoz de la CUP, Eulalia Reguant, le ha replicado que "renta básica universal, señora Geis, no renta garantizada universal" y ha subrayado que defienden la "renta básica universal como rediseño fundamental de la distribución de la renta". "No hay acuerdos estériles cuando se habla de garantizar derechos, y la renta básica universal no se toca", ha sentenciado.
"Y no porque lo decimos nosotros, sino porque es una herramienta básica para garantizar por primera vez un mínimo de autonomía a la ciudadanía de este país. Es la base de la libertad republicana que algunos dicen defender. Si no quieren garantizar estos derechos , expliquen cómo lo quieren hacer", ha concluido.