La CUP ha informado en un comunicado de las condiciones que ha puesto a ERC para llevar a cabo "cualquier tipo de negociación" y han reclamado "detener las hemorragias 'que ha habido en la acción política de los partidos que han formado parte del Gobierno durante la pasada legislatura y que vulneran el derecho a la vivienda y el derecho a la protesta".
Los anticapitalistas han exigido "la necesidad urgente de poner fin al uso de balas de foam por parte de las brigadas antidisturbios de los mossos d'Esquadra, la no intervención de las unidades antidisturbios a los desahucios y cesar las acusaciones particulares de la Generalidad de Cataluña contra movimientos sociales, activistas y el movimiento popular a favor del derecho a la autodeterminación".
Los cupaires han valorado "positivamente" que ERC se avenga a trabajarlas y ha remarcado que era "condición urgente, previa y necesaria para la CUP se mantuviera sentada en la mesa de negociaciones para encarar la próxima legislatura".
La formación anticaputalista considera que un compromiso para abordar estas cuestiones de "sentido común e imprescindibles" era necesario antes de "sentarse a hablar de nada más" y aseguran que "estarán atentos a que los compromisos alcanzados sean una realidad a corto plazo".
Finalmente, la CUP ha explicado que en la reunión mantenida con el grupo republicano "se ha acordado trabajar para llevar a cabo acciones inmediatas en los ámbitos de la represión ejercida por el departamento de Interior y de la emergencia habitacional, así como seguir trabajando con medidas más estructurales al respecto para garantizar una vivienda digna y una transformación del modelo policial ".