El Govern no descarta ahora recurrir a los 2.000 rastreadores del Ejército que el presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, ha puesto a disposición de las comunidades autónomas ante los rebrotes de coronavirus. “Si es necesario solicitaremos ayuda”, ha asegurado este martes la portavoz del Govern, Meritxell Budó, en roda de premsa.
Las palabras de Budó contrastan con lo que decía el presidente de la Generalitat, Quim Torra, a finales de marzo, en pleno pico de la pandemia, cuando sólo quería la ayuda del Ejército si era para bloquear las pistas del aeropuerto el Prat para impedir el tráfico aéreo, tal y como ocurrió en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil.
“Si el Ejército quiere venir a Cataluña y nos quiere ayudar, que se plante en la pista del aeropuerto y evite que aterricen los aviones. Lo que necesitamos es, de verdad, detener este país”, aseguró Torra en una entrevista en Catalunya Radio el pasado 20 de marzo.
También el consejero de Interior, Miquel Buch, rechazó la ayuda del Ejército el pasado 18 de marzo y consideraba que desplegarlo era “exagerado” y “del todo innecesario”. “En Cataluña no lo necesitamos”, añadió, porque “la solución para hacer frente al coronavirus no pasa por una estrategia militar ni policial”.
La portavoz de la Generalitat también descartó el pasado 27 de agosto la ayuda del Ejército porque “tenemos un sistema propio”, en referencia a el programa que ofrece la empresa Ferrovial. “Se han multiplicado los efectivos de rastreo desde el Govern de Catalunya”, señaló.
Ahora, sin embargo, Budó ha asegurado que “si se da la situación de que Catalunya lo necesita, lo pediremos”, aunque indica que “las autoridades sanitarias nos dicen en este momento que no es necesario”.
