La ex diputada de la CUP, Anna Gabriel, ha cambiado su imagen desde que se decidió marchar a Suiza por no comparecer ante el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena, que la había convocado para tomarle declaración como imputada en el sumario instruido contra los dirigentes independentistas catalanes investigados por el proceso soberanista.
Gabriel ha cambiado su peinado y ha dejado atrás las camisetas reivindicativas, que lucía en cada pleno del Parlament, con lemas como: "Barcelona Antifa", "Todas somos antifascistas", "Open your fu**ing borders "," Sin miedo, desobedeciendo por la independencia "o" Justicia encausadas del caso Bershka, bastante abusos de la Guardia Urbana".
También lució muchos lemas a favor de la lucha feminista: "Cuando una mujer avanza ningún hombre retrocede", "Mi cuerpo, yo decido", "O jugamos todos o pinchamos la pelota", "Absolución feministas encausadas", "La revolución será feminista o no será "o" Entre todas, todo "
Gabriel ha explicado en Catalunya Ràdio que "tengo un trabajo estable, en el ámbito del derecho laboral, y hago lo que he hecho toda la vida que es militar". "He decidido que la forma de estar en este país es la de trabajar y enraizarse me en la gente que quiere cambiar las cosas aquí", ha añadido.
Por último, ha calificado su situación en Ginebra como "un exilio de base". "Cuando llegamos aquí no pusimos el foco en mi persona sino en la situación que se estaba viviendo en España", ha concluido.