Ernest Maragall, en una entrevista en El món a RAC1, ha reconocido que "es más complejo que sea alcalde. No está cerrado definitivamente pero está orientado en una dirección muy explícitamente contraria a partir de las decisiones de la señora Colau, el señor Valls y el señor Collboni".
"Los votantes de Colau lo tienen claro. Los afiliados a la organización, debiendo contestar una pregunta explícitamente capciosa, es otra cosa", ha dicho Maragall, pese a matizar también que "seguimos confiando en la razón y en la inteligencia colectiva de este espacio político".
"En el caso de Barcelona hay unos resultados electorales muy explícitos y evidentes que incluyen un mensaje democrático muy claro, a favor de las opciones progresistas y republicanas. Lo que está en juego es eso", ha remarcado. "El bloque hoy es el que forman BCN EN Común y el PSC, y es un bloque decantado. Es un bloque al otro lado del río de la libertad", ha añadido.
"En Barcelona estamos hablando de sumar agua y aceite, el fuego y el viento, estamos hablando de ir absolutamente en contra del sentido más explícito de la ciudadanía de Barcelona. Es una aritmética que expresa absolutamente lo contrario de lo que se pretende defender", ha lamentado.
"Cuando dicen que sólo es un día, estemos atentos a lo que pasará los próximos días con otros ayuntamientos o en la propia Diputación de Barcelona. Me consta que hay conversaciones y casi acuerdos que serán igualmente explícitos en otras alcaldías e instituciones. Es una posibilidad y una probabilidad política que la Diputación de Barcelona esté gobernada por el PSC con Ciudadanos", ha sentenciado.