El exsecretario general de CDC y ponente de la Constitución, Miquel Roca, ha replicado las palabras del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, que criticó a los nacionalismos y los comparó con "el nazismo y el marxismo". El abogado ha expresado que "soy catalán, catalanista y nacionalista catalán; y no soy nazi. Cualquier pretensión de identificar mi catalanismo con la ideología nazi me ofende profundamente".
En un artículo en La Vanguardia dice "¡basta!" y expresa que "nací en el exilio bajo las bombas de Hitler y siempre me ha gustado simbolizar esta circunstancia con un permanente compromiso -que compartimos una gran mayoría de los catalanes- por la libertad, la democracia y el progreso. Exactamente aquello que el nazismo querría destruir".
"Muchos nacionalistas catalanes -recuerda- conocieron los campos de exterminio nazis. Fueron perseguidos por nazis y por sus colaboradores franquistas, en toda Europa y en España. Sufrieron represión y construyeron, con muchos otros, espacios de resistencia en defensa de la libertad y del pluralismo. El nacionalismo catalán, como hecho de libertad, se identifica siempre como una fuerza antifascista. Me ofende, sí, cualquier intento barriobajero y perverso de identificación con los nazis".
Por otra parte, manifiesta que "los socios del Barça, por el hecho de serlo, no son nazis. Tienen derecho a sentirse, si quieren, catalanistas y nacionalistas. Les puede hacer ilusión que su campo se asocie a una gran manifestación de catalanidad. Nadie les puede acusar por esto de nazis. El ejemplo de civismo y de corrección que dieron al mundo no trasladaba ninguna imagen nazi. Soy del Barça; no soy nazi".