Un subinspector de los Mossos d’Esquadra ha denunciado que una parte de los manifestantes concentrados el 20-S en Sabadell en contra de una operación policial tenían una “actitud agresiva y violenta”.“Vimos empujones, patadas y puñetazos”, ha relatado en el juicio del procés a preguntas de la fiscalia. Los hechos tuvieron lugar el 20 de septiembre en Sabadell, durante el registro del domicilio del entonces alto cargo de la Generalitat, Joan Ignasi Sánchez.
El testigo ha añadido que los agentes de la Policia de la Generalitat allí desplazados recibieron insultos como “gossos d’esquadra, fuerzas de ocupación o hijos de puta”. “Incluso uno de ellos portaba un casco en el codo y con ese casco arremetió a diferentes agentes de la Arro”, ha relatado.
El agente ha insistido en que “veíamos que la actitud por una parte de la masa era agresiva” y ha destacado que “el punto más algido de violencia” fue cuando la comitiva judicial abandonó el domicilio de Ignasi Sánchez con él detenido. El subinspector de los Mossos fue uno de los cinco agentes que resultaron heridos leves aquel día.
Por otro lado, un inspector de la Policia de la Generaliat que también participó en la actuación policial de Sabadell ha descrito que a primera hora del día habia unas setenta personas, pero que a media mañana llegaron a ser unas 700, de las cuales “siempre había un grupo de 100 personas más agresivo”. “Al final del operativo judicial, la masa nos acometió y algunos mossos caímos y nos hicimos daño”, ha declarado.
