El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ya tenía preparada su fuga a Bélgica el pleno del 27 de Octubre en que Carme Forcadell, ante la negativa a hacerlo de ningún miembro del Govern, declara la independencia en el Parlament, según explica el libro 'Toda la verdad. La crónica definitiva de los días decisivos del Proceso ", escrito por los periodistas Odei Etxarte, Neus Tomàs, Ferran Casas, Marc Martínez, Roger Mateos y Gerard Pruna.
"Puigdemont envía un emisario a Bruselas el día 27 para que intente hablar con el Gobierno belga", ha explicado la periodista Neuss Tomàs. El ex president quería saber si sería acogido por las autoridades belgas, aunque dos días más tarde instó a sus consejeros a ir a los despachos mientras él huía sin avisar.
Tomás ha relatado que Jordi Turull no quería marcharse por la edad avanzada de sus padres, Carles Mundó porque hacía pocos días que se había casado y sólo aceptaba huir si lo hacía todo el Govern, mientras que Raül Romeva apelaba a "la dignidad y el orgullo" para quedarse en Cataluña.
Por su parte, el periodista Ferran Casas ha explicado que "no estaba cerrado" quien huía y quién se quedaba. "En verano ya hay una conversación entre Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, donde Puigdemont le dice que la prisión en ningún caso y que antes se irá al exilio y Junqueras le dice lo contrario, que él cree que se debe quedar aquí. Tiene una reunión con el núcleo dirigente de ERC donde les dice que se irá a la cárcel".
