Nàtalia Garriga y Tània Verge, que mañana tomarán posesión como consejeras de Cultura y de Igualdad y Feminismos respectivamente, tienen o han tenido problemas con la justicia debido al proceso soberanista y al referèndum.
Garriga, que es la secretaria de Política Cultural, Educación y Deportes de ERC, fue detenida el 20 de septiembre de 2017 por la Guardia Civil cuando era directora de servicios del Departamento de Vicepresidencia y Economía y Hacienda. Actualmente está imputada por el juzgado de investigación número 13 de Barcelona en la causa sobre el 1-O.
Verge, que no milita en Esquerra y llega como independiente, fue una de las síndicas electorales del 1-O. Fue encausada, juzgada y posteriormente absuelta por los delitos de desobediencia y usurpación de funciones de los que se le había acusado. La Fiscalía, de hecho, acusó de estos delitos a todos los miembros de la Sindicatura del 1-O, y todos ellos fueron absueltos.