El ex presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, ha acusado a la Policía de introducir sobres con dinero en su casa para incriminarle. Rosell explica en el libro "Un fuerte abrazo", que estará a la venta el próximo 23 de marzo y que avanza El Mundo, que el día del registro en su domicilio el 23 de mayo de 2017 "se acerca a mí uno de los policías y me dice que tenemos que comprobar el contenido de un armario juntos". "Hasta entonces, todo el registro lo habían hecho sin mí. No lo entiendo, pero hago caso. El policía abre el armario y va directamente a un abrigo de Marta y de uno de los bolsillos saca un sobre con una inscripción que dice ‘RT’ y ‘5K’", señala.
"Le digo que aquel sobre no es mío y él me responde que entonces debe ser de mi mujer. Le digo que no, que no es mío ni de ella, que esta mañana este sobre no estaba allí” expone el el mandatario azulgrana, que advierte a los policías que "lo que hacéis es muy feo”. Rosell intuye entoces que lo que la Policía busca en su casa es dinero en metálico: “Le cuento que en casa el dinero lo guardamos en una pequeña caja fuerte que tenemos, que después se la enseñaré. Enseguida mi cerebro ata cabos y les digo a mis abogados que me da la sensación de que todo esto es una conspiración, pero ¿de quién? ¿Y por qué? No lo sé”.
Rosell explica que el episodio del sobre tuvo lugar dos horas después del comienzo del registro judicial y que hasta ese instante había llegado a “dudar” de sí mismo por si existía alguna conducta irregular que no recordaba. “La señal del sobre con dinero me hace cambiar radicalmente mi pensamiento. En aquel momento, la duda de que había podido hacer algo mal, sin ser consciente, se desvanece”, enfatiza.
“Mientras tanto, el jefe llama al policía que está registrando todo con una cámara de televisión para que haga una toma de los billetes que hay dentro del sobre. Los billetes están sobre la mesa de un pequeño despacho que tenemos en la habitación y el jefe le indica a la secretaria judicial que anote en la lista del registro el hallazgo. Entonces -continúa- es cuando me cabreo, y mucho".
"Le digo que el sobre no es mío, que intuyo que él lo sabe perfectamente y que lo están grabando todo para filtrar las imágenes a la prensa, ya que cuando enseñas dinero en metálico en un registro, la gente enseguida piensa que aquella persona investigada es un delincuente. Estoy convencido de que con esta grabación empieza la operación de convertirme en el malo de la película ante la opinión pública”, añade.
OP.RIMET: 5 detenidos y 9 registros en una operación desarrollada en Cataluña y Andorra por blanqueo de capitales y organización criminal pic.twitter.com/eTbKloZFWL
— Policía Nacional (@policia) May 23, 2017
Sandro Rosell relata que "me encaro con el jefe y le vuelvo a decir que lo que están haciendo es muy feo, me doy cuenta de que todos los billetes (50 billetes de 100 euros, es decir, 5.000 euros, o los ‘5K’ manuscritos en el sobre) son nuevos y correlativos en el número de serie". "Entonces –prosigue- le hago ver al policía el detalle de los números correlativos mientras le comento que quien haya puesto aquel dinero allí es muy burro. Se lo digo literal y explícitamente entendiendo que no se puede molestar, porque se supone que no ha sido él".
Acto seguido, el ex presidente del Barcelona pide a su abogado "que los grabe con su teléfono, puesto que yo en aquel momento no tenía mi Iphone porque ya me lo habían confiscado. También le pido que grabe sobre todo los números de serie". "Le explico al policía que lo grabamos para cuando sea el momento de hacer un seguimiento de la serie desde la Casa de Moneda y Timbre hasta el banco al que haya ido a parar, así quizá podremos identificar quién había retirado aquel dinero", cuenta.
La reacción de Rosell provoca un cambio en la posición de los investigadores: "El hecho de que seamos nosotros los que grabemos los billetes surte efecto en el policía, porque pasa de estar muy tranquilo con mis quejas anteriores a ponerse muy nervioso, a sudar (aunque hacía calor, no era tan intenso como para sudar), y lo más curioso de todo, pide a la secretaria judicial que elimine de sus anotaciones el dinero encontrado. Lo justifica diciendo que es normal y legal que tenga 5.000 euros en metálico en casa".
Sandro Rosell señala en el libro "el policía que había encontrado el dinero empieza a indicar a la secretaria judicial que no tiene que anotar en el registro el dinero que poco antes había pedido incluir en el acta". "Al final, después de la intervención de mis abogados, la secretaria judicial deja constancia de todo, como nosotros reclamamos. Imagino que alguien de los que están allí, Policía Nacional, Guardia Civil o funcionarios del juzgado, en medio de la confusión, ha puesto el sobre dentro del armario justo antes del registro".