El distrito de Gràcia, con Eloi Badia (Comunes) de concejal del distrito y con Ferran Mascarell (Junts) de concejal presidente; escogió el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, como pregonero de las fiestas de este año para "poner en valor su activismo social y cultural" y añadía que "ha reivindicado el compromiso con la cultura popular del barrio como herramienta de cohesión y autoestima colectiva".
Sin embargo, el disparo les salió por la culata porque la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, fue abucheada en el acto que daba el pistoletazo de salida a las fiestas. Los asistentes silbaron a Colau e impidieron que la alcaldesa pudiera iniciar su discurso.
El líder de Òmnium Cultural, de hecho, tuvo que intervenir para que Colau pudiera hablar. "Esto de luchas compartidas y de sumar. En tres años y ocho meses de prisión sólo quiero pedir una cosa. Escuchar, es lo que no quiere hacer España con nosotros, porque tiene miedo de la palabra. Ada, Ferran, Eloy, todos nosotros formamos parte de un mismo pueblo. el objetivo de España es dividirnos, no nos dejemos dividir", dijo.